miércoles, 11 de marzo de 2015

Emociones a flor de piel.

La vida es maravillosa, tiene esas cosas por las que te das cuenta que vivir es el mejor regalo que podemos tener. Nada en este mundo tiene valor ante las emociones que se viven cuando sientes el amor correspondido de la persona a la que amas con todas tus fuerzas.. Todo deja de tener importancia cuando esa misma persona, te mira fijamente a los ojos y te dice que te ha echado de menos. Todo se olvida por un instante cuando de repente te fundes en un abrazo y todo comienza a fluir por dentro de tu cuerpo, como si estuviéramos desnudos y nuestra piel se hubiese fusionado.

La vida es maravillosa, tiene estas cosas que te hacen sentir que un bache, es necesario para coger impulso y vivir en la máxima expresión todo aquello que haces con esa persona. A veces las cosas no se pueden explicar con palabras y ayer las palabras fueron necesarias, pero la demostración de amor prevaleció sobre todo lo demás. 

Ayer, durante un espacio de tiempo dejamos de hablar para mirarnos, tocarnos y leer entre líneas todo aquello que el corazón estaba gritando. Nos estuvimos mimando con palabras, con besos, con miradas y con olores..

Han pasado 46 días desde que decidimos parar esto, pero no ha pasado el tiempo. Ayer nos dimos cuenta de que el tiempo es para aquellos que lo necesitan, pero no para nosotros. De repente todo se cae, todo se silencia, el tiempo se para. Nos abrazamos, nos besamos y nos amamos y ambos nos damos cuenta que nuestra conexión es de tales dimensiones que parece que el tiempo se ha parado para nosotros. El tiempo era obligatorio, debía haber un 'stop' pero éste nos guardó la mejor de las recompensas.

Tenemos esa bonita forma de demostrarnos el amor. Nuestra forma de tocarnos la cara mientras nos besamos, nuestra forma de olernos, de tocarnos el pelo.. Todo eso es mágico y representa un equilibrio entre el amor, la pasión y el cariño que me es imposible explicar con palabras.

Hoy me doy cuenta de que la vida puede ser maravillosa. Te quita lo más grande que tienes, pero si le demuestras que lo tienes dentro es real y sincero, la vida es justa con nosotros. La vida me ha demostrado que por encima de todo lo que pase, de lo bueno lo malo y lo regular, está la magia que existe entre Nuria y yo.

Hemos dado un paso, aún queda un largo camino por delante pero desde ayer sabemos que el camino lo estamos recorriendo juntos. Cada uno a su manera, con su forma de ver la vida y lo que para nosotros representa nuestra pareja. 

Nuria es mi Ángel de la Guarda, y yo soy el guardián de su castillo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario